Ecocardiografía Transtorácica

¿Quién puede realizar una ecocardiografía transtorácica?

No existen contraindicaciones particulares para la ecocardiografía: cualquiera puede someterse al examen.

¿Cómo funciona la ecocardiografía transtorácica?

El paciente debe acostarse con el torso desnudo en la cama del ecografista, quien colocará electrodos en su pecho. Posteriormente, el ecografista extenderá un gel especial sobre el tórax del paciente y sobre el transductor, una sonda que, apoyada en el tórax, emite ultrasonidos que, reflejados y reelaborados por el equipo, permiten visualizar el corazón y sus estructuras. La sonda se moverá hacia el pecho con una presión suave. Se le puede pedir al paciente que permanezca quieto o que respire profundamente. Al finalizar el examen se retirarán los electrodos y solo quedará limpiar el gel que quedó en el tórax. La duración total del examen es de aproximadamente 10-15 minutos.

¿La ecocardiografía transtorácica es dolorosa o peligrosa?

La ecocardiografía transtorácica no es invasiva ni dolorosa y le permite retomar su rutina normal inmediatamente después del examen. Incluso cuando se trata del uso de agentes de contraste, estos son sustancias no ionizantes e inocuas para la salud.