La ergotamina se usa para prevenir y tratar los ataques agudos de migraña, incluidas las formas con aura.
¿Cómo funciona la ergotamina?
La ergotamina ayuda a aliviar las migrañas al estrechar los vasos sanguíneos del cerebro.
¿Cómo se toma la ergotamina?
La ergotamina se toma por vía oral ante los primeros signos de un ataque de migraña. En caso de ser necesaria una segunda dosis, no debe tomarse antes de los 30 minutos de haber tomado la primera. Además, no se deben exceder las dos dosis de ergotamina por ataque y no se deben tomar más de tres comprimidos en 24 horas o cinco comprimidos en siete días, salvo indicación específica del médico.
Las tabletas para disolver debajo de la lengua no deben tragarse enteras ni masticarse.
Efectos secundarios de la ergotamina
Los posibles efectos adversos de la ergotamina incluyen:
- mareo
- náuseas
- Él vomitó
Es importante consultar a un médico de inmediato si tiene:
- sarpullido
- urticaria
- picar
- dificultades respiratorias
- opresión en el pecho
- hinchazón de la boca, cara, labios y lengua
- dolores en el pecho
- latidos del corazón rápidos, lentos o irregulares
- dolores musculares
- debilidad de las extremidades
- manos o pies entumecidos, fríos, azules o con escozor
- dolor de cabeza persistente
- mareos persistentes
- dificultad para respirar
- hinchazones
- debilidad
Contraindicaciones y advertencias
La ergotamina puede causar mareos que pueden interferir con la capacidad para conducir o manejar maquinaria peligrosa y que pueden empeorar con el alcohol.
Antes de tomarlo, es importante que informe a su médico:
- de cualquier alergia al principio activo, a sus excipientes o a cualquier otro fármaco o alimento
- otros medicamentos, medicamentos a base de hierbas y suplementos que esté tomando, especialmente antifúngicos, medicamentos contra el VIH, delavirdina, efavirenz, antibióticos, betabloqueantes, zileuton, droxidopa o simpaticomiméticos
- si ha tomado un agonista del receptor de serotonina HT1 en las últimas 24 horas
- si sufre (o ha sufrido) otro tipo de dolores de cabeza, enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, porfiria, problemas hepáticos, renales o pulmonares, colesterol alto, diabetes o infecciones graves
- si está embarazada o amamantando
El medicamento no debe administrarse a niños y debe administrarse con precaución a los ancianos, que pueden ser más sensibles a sus efectos.