La gastrostomía percutánea radiológica es un procedimiento que permite introducir un catéter de alimentación directamente en el estómago a través de la piel.
¿Qué es la gastrostomía percutánea radiológica?
La gastrostomía percutánea radiológica consiste en crear un orificio (fístula) en la pared anterior del abdomen o entre la pared abdominal y la pared anterior del yeyuno. La fístula se crea guiando las maniobras con técnicas radiológicas que permiten visualizar el interior del organismo. Una vez creado el paso, se fija el aparato digestivo al abdomen con unos anclajes especiales y, finalmente, se introduce una cánula en el interior de la fístula para la nutrición e hidratación enteral.
¿Cómo se realiza la gastrostomía radiológica percutánea?
La cirugía de gastrostomía percutánea radiológica generalmente requiere una estancia hospitalaria de al menos 48-72 horas. El paciente, una vez acostado en la mesa de operaciones, recibe los medicamentos necesarios por vía endovenosa, en algunos casos también se puede administrar oxigenoterapia. A continuación se procede a la exploración radiográfica del abdomen, la introducción de aire en el estómago mediante una sonda nasogástrica o un catéter y, por último, la creación de la fístula y la comprobación de su funcionalidad mediante inyección lenta de agua.
¿Cuáles son las ventajas de la gastrostomía percutánea radiológica?
La gastrostomía percutánea radiológica tiene ventajas sobre otras formas de nutrición artificial. En particular, te permite mantener el sistema digestivo intacto y también se puede realizar después de usar una sonda nasogástrica. Su eficiencia es del 98%.
¿La gastrostomía percutánea radiológica es dolorosa y/o peligrosa?
La gastrostomía percutánea radiológica no es peligrosa. La mortalidad fluctúa entre el 0 y el 0,7%, mientras que la incidencia de complicaciones leves o graves ronda el 3 y el 6%, respectivamente.
¿Qué pacientes pueden ser sometidos a una gastrostomía percutánea radiológica?
La gastrostomía percutánea radiológica está indicada en los casos en los que sea necesario depender de la nutrición enteral durante mucho tiempo. Este último puede ser necesario en caso de alteración de la conciencia o de la capacidad para tragar , por ejemplo , como resultado de afecciones neurológicas (como ELA o demencia), tumores (como cáncer de esófago) u otras enfermedades (como fibrosis quística o acalasia) .
Hacer un seguimiento
En las 24 horas siguientes a la realización de la gastrostomía, la fístula se utiliza únicamente para la hidratación y posteriormente se activará para la nutrición, que debe realizarse según un plan de alimentación prescrito por los médicos. La fístula también debe limpiarse adecuadamente y revisarse todos los días.
¿Hay reglas de preparación?
- Antes de la operación es necesario someterse a los análisis de sangre adecuados y un examen anestesiológico. En caso de tratamiento con algunos fármacos anticoagulantes (en particular dicumaroles) es necesario dejar de tomarlos al menos cinco días antes de la operación.
- La gastrostomía debe realizarse después de un ayuno de al menos 12 horas.