Litotricia extracorpórea por ondas de choque (ESWL)
A partir de la década de 1990, la litotricia extracorpórea por » ondas de choque » anuló el tratamiento de los cálculos urinarios y pasó a ser la primera opción para todos los cálculos renales menores de 2 cm y en la mayoría de los cálculos ureterales no complicados.
Esta técnica no incluye ninguna maniobra invasiva sobre la persona, que sólo tiene que tumbarse en la máquina colocando su costado sobre un cojín lleno de agua (fig. 1-2).
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Las ondas de choque producidas por el litotriptor atraviesan el cuerpo humano canalizando toda la energía sobre la piedra, destruyéndola. La duración de la terapia es bastante corta (normalmente no más de 45-60 minutos ).
Este tratamiento no implica ningún tipo de anestesia ; la persona puede tener en ocasiones una sensación de malestar temporal en la zona donde se aplican las ondas.
En presencia de éxito de la terapia, con porcentajes que varían del 30 al 90% según las características del cálculo, los fragmentos serán expulsados por la orina en los días siguientes, a veces con cólicos. La primera orina expulsada después de la terapia suele tener rastros de sangre, sin embargo, con el paso de las horas y al consumir líquidos, se estabilizan en la normalidad.
Cuando el cálculo es grande (más de 2 cm) ya no hay indicación de terapia de ondas de choque, ya que la masa de los fragmentos generados podría ocluir el uréter provocando la oclusión urinaria. En estas situaciones se hace absolutamente necesario proceder endoscópicamente para eliminar los fragmentos, con el uso de un catéter ureteral interno temporal (stent Doble J).
Aun siendo el método menos invasivo del que disponemos, no debe considerarse inocuo y por tanto repetir la terapia una y otra vez en caso de fracaso. De hecho, hay que decir que, aunque en porcentajes muy pequeños, la energía liberada durante la terapia puede causar hematomas renales a corto plazo y, a largo plazo, hipertensión arterial y diabetes mellitus.
Descargo de responsabilidad
La información dada debe entenderse como indicaciones genéricas y en ningún caso reemplaza la opinión del especialista.