Lomustina

¿Qué es la lomustina?

La lomustina , al igual que las otras moléculas de cloroetil-nitrosourea, una vez en el cuerpo se degrada metabólicamente con la formación de varios metabolitos con actividad antineoplásica , incluido un catión de vinilo y un isocianato. Estos dos últimos grupos son los responsables de la actividad antitumoral y la toxicidad que muestran las nitrosoureas.

¿Para qué sirve la lomustina?

La lomustina es un fármaco de quimioterapia que , como tal, se utiliza para tratar varios tipos de cáncer. Los tumores malignos para los que se administra este medicamento son:

  • tumores cerebrales
  • cáncer de mama
  • enfermedad de Hodgkin
  • Cancer de pancreas
  • cáncer de pulmón
  • melanoma
  • mielama multiple
  • cáncer de ovarios

¿Cómo tomar Lomustina?

La lomustina se administra en forma de comprimidos para uso oral. Los comprimidos deben tomarse con abundante agua, preferiblemente antes de acostarse o con el estómago vacío. Las cápsulas deben tomarse siempre a la hora indicada por el médico, según sus indicaciones.

Efectos secundarios de la lomustina

Los efectos secundarios más comunes son:

  • reducción temporal en la producción de células sanguíneas por parte de la médula ósea (lo que resulta en un marcado aumento en el riesgo de desarrollar anemia, hematomas, sangrado e infección)
  • náuseas y vómitos
  • defectos fetales
  • pérdida de apetito
  • pérdida de peso
  • debilidad
  • sangrado
  • dificultad para caminar
  • Diarrea
  • letargo

Los efectos secundarios menos frecuentes son:

  • dolor oral y perversión del gusto
  • cambios temporales en la función hepática y renal
  • perdida de cabello
  • deterioro de la función respiratoria

Contraindicaciones y advertencias de Lomustine

El uso del fármaco está contraindicado en mujeres embarazadas o próximas a planificar una maternidad, ya que se ha demostrado que la Lomustina puede causar graves daños en el desarrollo del feto. Debe prestarse especial atención a la interacción de Lomustina con el ácido acetilsalicílico, ya que este último tiene propiedades anticoagulantes, lo que aumenta aún más el riesgo de desarrollar hemorragias.