¿Qué es un otoscopio y para qué sirve?
El otoscopio es un instrumento de diagnóstico óptico muy común, con una forma similar a la de un mazo; le permite observar la cavidad del oído interno y el tímpano.
Gracias al uso del otoscopio es posible comprobar el estado de salud del oído y en particular del tímpano , determinando o excluyendo anomalías (malformaciones, cuerpos extraños, lesiones) o patologías que afectan al órgano, siendo las más frecuentes es la otitis.
¿Cómo funciona el otoscopio?
El otoscopio consta de dos partes principales: el mango y la cabeza . El mango está hecho de plástico o metal, mientras que la cabeza está equipada con una luz, que ilumina el canal auditivo y la membrana timpánica, y una lupa, que permite una inspección más precisa de las estructuras del oído. El especialista, sujetando el otoscopio, lo acerca al oído del paciente y, gracias a la luz y la lente, realiza el control.
¿El otoscopio es peligroso o doloroso?
La otoscopia es una operación diagnóstica segura , sencilla e indolora . Se puede realizar en adultos y niños.