Es una condición que se caracteriza por la reducción de volumen y degeneración funcional de los músculos . Es causado por la disminución del volumen de las células individuales y de la sustancia intercelular. Los motivos pueden ser fisiológicos (como sucede, por ejemplo, en el envejecimiento) o patológicos (como sucede, por ejemplo, en algunas enfermedades).
La parálisis muscular es la pérdida de la función muscular. Las formas en que esto ocurre son dos:
- flácido , también llamado «periférico» o «atrófico», que se caracteriza por la pérdida de la motilidad voluntaria acompañada de una disminución del tono muscular (los músculos aparecen adelgazados y flácidos y esto es lo que sucede, por ejemplo, en el caso de la infección por botulismo );
- espástica que implica la pérdida de la motilidad voluntaria. Se acompaña de un aumento del tono muscular que se traduce en el estado perenne de contractura (espasticidad) de los músculos (es lo que sucede, por ejemplo, en el caso de la infección por tétanos). La parálisis flácida también puede afectar músculos individuales específicos.
¿Qué enfermedades pueden estar asociadas con la atrofia muscular y la parálisis?
Las patologías asociadas son las siguientes:
- Lepra
- Pie diabético
- Poliomielitis
- Sífilis
- Bursitis
- Botulismo
- Cirrosis del higado
- ictiosis
- Síndrome del túnel carpiano
Esta no es una lista exhaustiva y siempre se recomienda consultar con su médico de cabecera en caso de que los síntomas persistan.
¿Cuáles son los remedios para la atrofia muscular y la parálisis?
Dado que las causas que conducen a la atrofia muscular son numerosas, los remedios a implementar deben ser adecuados a la situación individual y depender de la identificación de la patología subyacente.
Con atrofia muscular y parálisis, ¿cuándo consultar a su médico?
En caso de atrofia y parálisis muscular flácida siempre es recomendable contactar con su médico para una consulta, especialmente si padece alguna de las enfermedades asociadas (consulte la lista de enfermedades asociadas).