La pubalgia es una enfermedad que se manifiesta con dolor en la zona púbica, la ingle o la cara interna del muslo . Los deportistas la padecen con frecuencia, pero también las personas que, sin realizar una actividad motriz exigente en el transcurso de la vida cotidiana, incurren en movimientos que condicionan un dolor agudo en la zona púbica o en el pliegue de la ingle.
¿Cuáles son las causas de la pubalgia?
Las causas de la pubalgia pueden ser:
- trauma previo en la pelvis o la rodilla
- limitaciones articulares congénitas y/o degenerativas
- enfermedades de los pies
- cambios en la curva de la columna vertebral
- Cambios en los músculos abdominales después de la cirugía
- sobrecarga muscular resultante de la disfunción postural.
A menudo, el uso de calzado inadecuado y los traumatismos en el pie y la pierna pueden provocar alteraciones en la forma de caminar, exponiendo los músculos a estiramientos anómalos, que son la causa de la reacción inflamatoria.
¿Cuáles son los síntomas del dolor en la ingle?
El síntoma principal del dolor en la ingle es el dolor. En las formas más leves se presenta al despertar o al inicio de los ejercicios físicos, tendiendo a desaparecer después del calentamiento. En las fases más graves de la patología, el dolor también puede aparecer de forma repentina, durante la realización de la actividad deportiva, de forma que impida su continuación o dificulte la marcha.
la clasificación
El dolor en la ingle puede ser de 3 tipos diferentes:
- enfermedad de los aductores
- osteoartropatía púbica
- síndrome de la vaina del recto femoral
El diagnóstico se encomienda al especialista y está condicionado por el tipo de dolor, su distribución y síntomas asociados.
- Enfermedad de los aductores:a sufrir son las estructuras musculares y tendinosas de la zona púbica, constantemente sometidas a continuas situaciones de sobrecarga que pueden provocar inflamaciones y alteraciones de su normal funcionamiento. Si esta condición se vuelve crónica, puede comprometer la arquitectura de la articulación, formando microcalcificaciones.En el caso de los músculos aductores del muslo (músculos que sirven para cerrar los miembros inferiores), la inflamación es causada por movimientos rápidos de ajuste postural durante los cuales puede ocurrir un estiramiento y lograr un microtraumatismo, luego una inflamación local y dolor. El dolor en la parte interna del muslo es uno de los síntomas característicos, al igual que el dolor al abrir y cerrar el muslo. Bajarse del auto o quitarse los pantalones son ejemplos.
- Osteoartropatía del pubis: esta forma de pubalgia se caracteriza por la artrosis de la sínfisis del pubis (formación fibrocartilaginosa interpuesta entre dos hemipelvis) y puede ser generada por condiciones de sobrecarga como consecuencia de hiperestrés crónico repetido (particularmente en deportes, trabajo o por razones constitucionales y traumáticas). La sintomatología se caracteriza por dolor en la zona púbica que se acentúa durante el movimiento (subir escaleras, toser, estornudar, movimientos de un miembro que actúa como pivote).
- Síndrome de la vaina del recto femoral : resulta de un traumatismo (microlesión de la fascia superficial e irritación del nervio perforante superficial).
Pubalgia y embarazo Pubalgiatambién puede ocurrir durante el embarazo (síndrome del anillo púbico o síndrome de Lacomme), especialmente después del sexto mes.La pelvis femenina debe adaptarse al crecimiento del feto, la sínfisis púbica puede sufrir diástasis progresiva (eliminación de las articulaciones) tanto inducida por cambios hormonales y ligado a la adaptación progresiva de las estructuras anatómicas (causas mecánicas y neuromusculares). Los síntomas son: dolor localizado en la región púbica y en la parte interna del muslo asociado a dolor de espalda. El origen de este dolor se remonta al aumento de peso del feto y al progresivo desplazamiento del centro de gravedad hacia adelante, desde el ajuste de anteversión (movimiento de la pelvis en el que la parte superior retrocede, el coxis sube, la curvatura lumbar aumenta), por movimientos de nutación de la pelvis (apertura de la parte inferior de la pelvis), con la consiguiente remoción de las superficies articulares de la sínfisis púbica.Se puede generar un alivio practicando constantemente ejercicios de relajación muscular especialmente en el agua, al no mantener la estación por mucho tiempo erguido, en adoptar una postura simétrica de las piernas (por ejemplo, durante la práctica de trabajo) y, durante el descanso nocturno, colocando una almohada entre las piernas. En la fase aguda, el dolor puede aliviarse con la toma de antiinflamatorios (solo bajo prescripción médica) y con un posible tratamiento de fisioterapia (en relación con posibles malposiciones de la columna). Los síntomas tienden a retroceder hasta que desaparecen unas semanas después del parto.
El diagnostico
El diagnóstico de la pubalgia se realiza durante una visita al especialista fisiátrico y, por lo tanto, se basa en la observación clínica (sitio, tipo y modalidad de aparición del dolor).
Según el caso, el médico puede solicitar exámenes adicionales como: radiografía de la pelvis , ecografía y, si es necesario, resonancia magnética .
Los Tratamientos
No existen medicamentos específicos para el dolor de ingle. Si el trauma ha ocurrido por poco tiempo, se recomienda primero compresas frías y reposo.
Posteriormente, los antiinflamatorios y la terapia antiinflamatoria local (por ejemplo, ungüentos antiinflamatorios y emplastos medicinales) pueden ser efectivos.
Para aliviar el dolor y reducir el estado inflamatorio es muy útil la Tecarterapia. Los tratamientos con Tens , ultrasonidos o láserterapia son una alternativa . El tratamiento con ondas de choque , en particular, es efectivo cuando el dolor ha durado mucho tiempo. El tratamiento (tres sesiones repartidas en tres semanas), de hecho, restablece el riego sanguíneo natural de los tejidos inflamados y favorece la reabsorción gradual de los eventuales depósitos calcificados.
Posteriormente, es importante reeducar el músculo para su funcionamiento mediante ejercicios de estiramiento y fortalecimiento muscular.
Debe evitarse la actividad deportiva durante el período posterior al trauma. Los tiempos de recuperación dependen del caso específico.
Prevención
Hay indicaciones de que indirectamente pueden prevenir síntomas dolorosos (calzado adecuado, evitar actividades deportivas en superficies demasiado duras, etc.) e indicaciones reeducativas/rehabilitadoras dirigidas a recuperar una correcta estructura postural (en particular de la columna lumbar y la pelvis ).