Suplementos Atp

¿Qué son los suplementos de ATP?

Los suplementos de ATP son complementos alimenticios diseñados para aumentar la producción, el almacenamiento y la actividad de ATP (trifosfato de adenosina), una molécula esencial para el metabolismo energético.

¿Para qué se utilizan los suplementos de ATP?

Además de constituir una forma de energía que el cuerpo puede utilizar, por ejemplo, para contraer los músculos, el ATP también parece desempeñar otras funciones potencialmente beneficiosas; aumenta el flujo sanguíneo y promueve la vasodilatación.
Por estas razones, los deportistas pueden utilizar suplementos de ATP; sin embargo, sus beneficios en el rendimiento del ejercicio a corto plazo no parecen ser significativos. Sin embargo, parece que pueden ser útiles para mejorar la resistencia muscular durante entrenamientos prolongados, tal vez para aumentar el flujo sanguíneo y mejorar la capacidad de recuperación.
La ingesta oral de ATP también se ha asociado con una mayor fuerza muscular durante el ejercicio anaeróbico. Además, los suplementos que aumentan la producción de ATP, tomados junto con la cafeína, parecen potencialmente útiles para mejorar la composición corporal.

Sin embargo , la evidencia científica de la eficacia de los suplementos de ATP aún no es suficiente para certificar sus beneficios, y la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) no ha autorizado la afirmación según la cual el ATP podría ayudar a mantener el funcionamiento normal de los músculos porque efectivamente mejora la musculatura. tonifica, ayuda a los músculos a recuperarse del ejercicio y la fatiga, favorece el bienestar de la espalda, contribuye a la reducción de los dolores musculares, las contracturas musculares y la tensión muscular.

Advertencias y posibles contraindicaciones

Tomar suplementos de ATP podría afectar el efecto de algunos medicamentos. Antes de tomarlos, es recomendable consultar a su médico, también para descartar cualquier contraindicación. 
Los niveles muy altos de adenosina, un componente del ATP, se han asociado con dolores de pecho, dolores de cabeza, presión arterial baja, náuseas, sudores, sofocos, sensación de mareo, dificultad para dormir, tos y ansiedad. 

 

Descargo de responsabilidad  

La información proporcionada representa indicaciones generales y no reemplaza de ninguna manera el consejo médico. Para asegurar una dieta sana y equilibrada siempre es bueno confiar en el consejo de tu médico o de un experto en nutrición.